El jurado, junto a la maqueta del anteproyecto ganador del concurso. Foto: JAUME MOREY

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La fachada marítima de Palma tendrá un Palacio de Congresos que mirará al mar, construido a base de aluminio, vidrio y marès, con una altura máxima de 20 metros, flexible, con módulos independientes que pueden albergar hasta 3.000 personas, zona comercial y una amplia terraza superior. El hotel, de forma triangular, quedará unido al palacio por una pasarela. Es el anteproyecto del navarro Patxi Mangado Beloqui, ganador del concurso internacional convocado por la sociedad mixta formada por el Ejecutivo balear y el Ajuntament de Palma para la construcción del Palacio de Congresos y un hotel de lujo. El anteproyecto de Mangado, que incluye un espacio público de 545 metros cuadrados, divididos en dos parcelas y dos aparcamientos, obtuvo 6 votos, tan sólo uno más que el presentado por el mallorquín Antoni Barceló, finalista del concurso, por delante de los proyectos de arquitectos de prestigio como Rafael Moneo, Dominique Perrault, Richard Rogers, Eduardo Souto de Moura, Juan Navarro y Carlos Meri.

«La decisión del jurado ha sido muy difícil, más complicado de lo esperado», afirma Jaume Matas, presidente del Govern balear. «No buscábamos un hito porque tenemos la Catedral, que nos seguirá definiendo», añade Luis Corral, decano del Colegi d'Arquitectes y miembro del jurado. «Tanto el anteproyecto de Mangado como el de Barceló compartían el valor iconográfico y expresividad formal que buscábamos. No querían entrar en competencia con la riqueza de Palma. El ganador es un edificio arraigado en la ciudad, capaz de albergar cualquier acontecimiento, con cierta autonomía, todo tipo de ofertas y con un buen funcionamiento. Los ciudadanos podrán ver desde el paseo parte de su interior», añade el arquitecto Carlos Ferrater.

Según explicó el jurado, la decisión se tomó en la última votación y se descartó el anteproyecto de Barceló por cuestiones de funcionamiento. «Nos sentimos con cierta deuda moral porque ha estado a punto de ganar. Estudiaremos una fórmula que darle un reconocimiento», afirmó Matas. El proyecto definitivo estará listo en 2006 e incluirá algunas recomendaciones del jurado, como mejorar la permeabilidad de la fachada posterior del edificio y trabajar mejor la cubierta. Las ocho maquetas de estos anteproyectos estarán expuestos en Cort a mediados de julio. Por otra parte, la Comissió del Centre Històric se pronunció ayer contraria a la catalogación del edificio de Gesa, próximo al futuro Palacio de Congresos. La última palabra la tiene el Consell.