TW
0

NEKANE DOMBLÀS/EFE
Balears perderá entre 642 y 7555 millones de euros de financiación, en caso de que el vicepresidente del Gobierno, Pedro Solbes, lleve a la práctica la reforma del sistema de financiación que ha anunciado esta semana. Solbes explicó su intención de eliminar la cesión del 35 por ciento del IVA que ya tienen las comunidades autónomas y, a cambio, subir el porcentaje de cesión de IRPF del 33 al 40 o al 50 por ciento.

En el año 2005, Balears tendrá unos ingresos por IVA de 836 millones de euros, que se dejarían de recaudar según la propuesta de Solbes. A cambio, el aumento del porcentaje de IRPF tan sólo aportaría unos ingresos adicionales de entre 81 y 194 millones en función de si se llega al 40 o al 50 por ciento.

Este importante descenso en los ingresos ha hecho que el conseller d'Economia, Lluís Ramis de Ayreflor, considere inaceptable la propuesta lanzada por el Gobierno central. «La idea lanzada por el vicepresidente no se puede considerar propiamente un modelo», señaló el conseller. En cualquier caso, Ramis de Ayreflor lamentó que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no haya cortado de raíz estas posibles especulaciones.

Ramis señaló que no cree que el Gobierno haga un planteamiento de financiación tan simplista para las comunidades cuando la recaudación del IVA supone más del doble de lo que ahora se recauda por IRPF. Añadió que el Gobierno se ha visto obligado a salir con estas propuestas tras conocerse las peticiones financieras de Balears, que coinciden con las de Cataluña.

La propuesta de Solbes fue rechazada además por UM. El responsable de Economía de este partido, Miquel Angel Flaquer, se mostró convencido de que esta propuesta es una «mala noticia para Balears», pues supondría perder un impuesto indirecto, el IVA, que «en épocas de alto consumo supone más ingresos para la comunidad».

«Depender únicamente de un impuesto, que es directo, que grava el patrimonio -en referencia al IRPF- es también un paso atrás», añadió el dirigente nacionalista, que también criticó que tampoco exista la intención, por parte del Gobierno central, de ceder el Impuesto de Sociedades.

En este sentido, Miquel Angel Flaquer señaló que «es importante» que el Govern balear tenga capacidad normativa sobre este último gravamen, pues «para afrontar una remodelación de la planta hotelera hace falta que se puedan establecer ventajas fiscales para la reinversión».