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La nueva subida de dos euros -el equivalente al IPC- en el precio de los billetes aéreos interislas volvió a provocar ayer un cruce de acusaciones entre PP y PSOE, partidos que se culparon mutuamente de ser los responsables de la subida aprobada por el Ministerio de Fomento. El president del Govern, Jaume Matas, consideró una «mala noticia» esta subida y lamentó que se haya hecho de manera «unilateral», sin comunicación previa a la Comunitat Autònoma. El president confió en que el Gobierno acceda a realizar la modificación de la declaración de servicio público para los vuelos interislas.

El portavoz del PP, Miquel Ramis, denunció la decisión de la ministra Magdalena Alvarez y criticó al Gobierno por subir las tarifas sin convocar las correspondientes comisiones.

La vicepresidenta del Govern, Rosa Estaràs, ha convocado a una reunión a los representantes de los consells para tratar de crear un «frente común» ante el Gobierno central que evite nuevas subidas en el precio de los billetes aéreos. El Govern propondrá una tarifa máxima de 58 euros para los vuelos, así como un aumento de las frecuencias.

En representación del Consell de Mallorca, que ya ha anunciado que acudirá a esta reunión, su presidenta, Maria Antònia Munar, consideró ayer un «engañabobos» el descuento aéreo para residentes ya que no se ve distorsionado por las constantes subidas de tarifa del Ministerio de Fomento.

En relación con este tema, el secretario general del PSIB, Francesc Antich, anunció ayer que el Ministerio de Fomento reunirá antes del verano a la Comisión Mixta de Transporte para abordar posibles cambios en la declaración de servicio público y recordó que la subida automática de las tarifas ha sido posible porque así lo permite la declaración «aprobada por el PP». El delegado del Gobierno también achacó la subida a la mala negociación del PP.