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J.T.B./N.D.
Que Balears sea considerada o no una «nacionalidad histórica» no es lo más importante. Se trata de un debate semántico y «la terminología es lo de menos». Para los socialistas, los importante es que se refuercen los derechos sociales de la ciudadanía. En este sentido, propondrá elaborar una Carta de Derechos Sociales. Así se expresó ayer Francina Armengol, portavoz del Grupo Parlamentario Socialista durante una pausa de las jornadas parlamentarias que ayer se iniciaron en la Cámara balear.

La reunión estuvo presidida por el secretario general del PSIB, Francesc Antich quien dio por cerrado el proceso de reorganización del grupo que se inició cuando abandonó la portavocía tras ser elegido diputado estatal en las pasadas elecciones generales. Antich insistió ante los parlamentarios en la necesidad de aprovecharse de que el PSOE esté gobernando en Madrid. En privado admitió algún tipo de descoordinación, sobre todo en los primeros meses.

En relación al retraso del Ministerio de Fomento en aprobar el decreto que hará posible el incremento de los descuentos para residentes, Antich pidió a la ministra Alvarez «un esfuerzo» para resolverlo lo antes posible. Sin embargo rechazó «por demagógicas» las críticas del Partido Popular (PP) y contrapuso la actitud del Ejecutivo autonómico, «de confrontación con Madrid», a la del Gobierno central, que ha adoptado, según dijo, medidas favorables para las islas, como el acuerdo de reforma de la Playa de Palma o el aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y de las pensiones.