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El Govern venderá su parte de la central lechera Prilac a los dos socios privados de la empresa, Grup Fontanet y la cooperativa Lleters de Mallorca. Las tres partes, hasta ahora propietarias cada una del 33 por ciento de la central, ya han llegado a un acuerdo para que la Conselleria d'Agricultura, a través de la empresa pública Semilla SA, se desprenda de su tercio y éste sea repartido por igual entre el Grup Fontanet y Lleters de Mallorca. De esta manera, Prilac, cuya central de producción se ubica en Porreres, perderá su participación pública y será enteramente privada, con un 50 por ciento para el Grup Fontanet y la mitad restante, para Lleters de Mallorca.

Impulsada por el Pacte de Progrés, con Mateu Morro (PSM) como conseller d'Agricultura, la central lechera Prilac inició su andadura con el objetivo de frenar el abandono de las explotaciones ganaderas de Balears e incrementar el precio del litro de leche pagado a los productores. Prilac fue inaugurada oficialmente en marzo de 2003. Sin embargo, con el cambio de Govern, los responsables autonómicos del PP, con Tomàs Cortès como conseller d'Agricultura, no demostraron ningún entusiasmo por Prilac y cuestionaron abiertamente la participación pública en la empresa. Cortès dimitió por motivos de salud y su sucesora, Margalida Moner, ha mantenido la misma línea. Tanto Cortès como Moner destacaron públicamente los déficits que sufría la central en sus primeros meses de funcionamiento.

Desde su puesta en marcha, Prilac ha sido objeto de dos ampliaciones de capital, participadas por igual por sus tres socios. Sin embargo, tanto el Grup Fontanet como Lleters de Mallorca quisieron acudir a una tercera ampliación, pero el actual Govern respondió a la propuesta con indiferencia, dando a entender que no quería aumentar su presencia y participación en la empresa. Ante esta situación, tanto el Grup Fontanet como Lleters de Mallorca han considerado que la mejor solución ante la situación creada es hacer suyo y repartirse por igual el 33 por ciento del Govern, a lo que el Ejecutivo autonómico ha accedido, dando así por finalizada su participación en la central lechera. Una parte del sector lechero mallorquín, más próxima a posiciones conservadoras, calificó de agravio la participación pública en Prilac.