TW
0

Los comerciantes de la Plaza Major han vuelto a mostrar su indignación y malestar al Ajuntament de Palma por la desordenada instalación de los puestos de venta de figuritas de Navidad en plena plaza, que suponen una barrera e impiden el paso de los compradores a sus tiendas. Uno de los comerciantes afectados por esta situación, Simó Valls, explicó que la concejal de Sanitat i Consum del Ajuntament de Palma, Marina Sans, se comprometió a que el problema quedaría solucionado este año. Sin embargo, para la sorpresa de los comerciantes, los puestos se han instalado con el mismo desorden que en años anteriores y la barrera de entrada a los comercios se mantiene inalterada.

«Nosotros no pedimos que los puestos abandonen la plaza -aseguró Valls-, pero sí exigimos que todas las casetas sean iguales, para que no haya trailers de tres metros de altura que tapan todos nuestros comercios». Según Valls, tras la toma de posesión de la nueva concejala, una representación de los comerciantes se reunió con Sans para explicarle que hace años que padecen esta barrera física que limita la entrada de compradores a sus tiendas. «La concejala nos aseguró que, para la pasada campaña de Navidad, era imposible actuar, pero se comprometió a que este año todas las casetas tuvieran la misma estructura, o sería la última cosa que haría. Pues bien, ya se puede ir porque este año todo sigue igual», señaló.Las quejas de los comerciantes no se circunscriben únicamente a la disparidad de tamaño de las casetas que se instalan en la Plaza Major. Señalan también que, durante estas fechas, la limpieza es especialmente deficiente cuando debería ser todo lo contrario. «Las brigadas limpian, pero el Ajuntament debería ser especialmente cuidadoso con un lugar tan señalado como la Plaza Major y especialmente en estas fechas», añadió. Los comerciantes esperan que, tal y como les prometió Cort, el problema que llevan sufriendo desde hace años se resuelva de una vez por todas.