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El combatiente del futuro irá equipado con la más moderna de las tecnologías, será capaz de responder en fracciones de segundos a una amenaza múltiple y severa en cualquier localización geográfica, y sin ayudas de drogas ni medicina alguna, podrá permanecer hasta siete días sin dormir.

«Como irá equipado con la tecnología GPS, será capaz de visualizar con exactitud lo que ocurre a su alrededor, evitando de esa manera, las bajas por fuego amigo, tan comunes en las guerra», añadió.

Verá de noche, no pasará frío ni calor, contará con chalecos de protección balística, sensores fisiológicos, videocámaras y, en el sumum de la perfección en combate, su uniforme cambiará de color para mimetizarse con el medio.

Este increíble «soldado universal» fue presentado ayer a los medios de comunicación por los máximos responsables de la Comandancia General de Balears en una jornada celebrada en la Base General Asensio de Palma.

El combatiente del futuro se integrará en fuerzas multinacionales, así que su equipo, armamento y material será interoperable con los aliados.

Se le considera como «un sistema», en donde lo que se persigue «es la integración de los distintos componentes del equipo y conseguir al final un producto cuyo valor es superior a la suma de las eficacias parciales por separado», según explicó el coronel José Ramos Barrera, director del programa Combatiente del Futuro del Ejército de Tierra. «Creemos que este combatiente del futuro actuará de forma preferente en poblaciones, en guerrillas en zonas urbanas donde estarán localizados el 60 por ciento de los conflictos», dijo Ramos Barrera.

Patricio Candia
Foto: Miquel Àngel Cañellas