La bahía de Palma acoge un año más el Trofeo Almirante Conde de
Barcelona, cuya XX edición está integrada por más de medio centenar
de embarcaciones de época, que han recuperado su amarre en pleno
Passeig Marítim. Auténticas joyas de la náutica de romántico sabor
y procedentes de catorce países que competirán a lo largo de esta
semana, llenando nuestras aguas de belleza y nostalgia.
Una iniciativa a cargo de la Fundación Hispania de Barcos de
Época, entidad organizadora de este acontecmiento deportivo y
cultural, destinado a la preservación del patrimonio naval y la
cultura marinera, sin protección en España hasta ahora, al
contrario de otros países con un amplio historial marítimo y
museístico. Objetivo consagrado en parte este año con la
presentación deGiraldilla, tras concluir su restauración, y que
junto aGiralda, que fue el yate del conde de Barcelona, participará
en la regata.
Tras el tradicional cocktail de bienvenida hoy a las 20.00 horas
en el Castell de Bellver, las regatas tendrán recorridos costeros
los días 18, 19, 20 y 21 de agosto, reservándose el domingo día 22
la Gran Parada, que precederá a la solemne entrega de premios. La
participación está reservada a todas las embarcaciones de madera y
acero, y según su construcción se incribirán en la categoría Época
(botadas hasta el 31 de diciembre de 1949) o en la de Clásicos
(entre el 1 de enero de 1950 y el 31 de diciembre de 1974).
Gabriel Alomar
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