Pau Collado, Carlos Delgado, Jaume Matas, Gabriel Sagristá y Pere Coli, durante el congreso. Foto: PERE BOTA

TW
0

Al menos 130 hoteles de Mallorca están siendo comercializados en los mercados emisores bajo la modalidad de «todo incluido» frente a los 70 contabilizados en 2003, lo que representa un crecimiento del 87,5 por ciento respecto a la temporada anterior, según informó ayer el director general de Ordenación Turística, Josep Aloy, en el transcurso del Congreso Nacional de Jóvenes Empresarios del Turismo, organizado por la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (CEAJE) y la revista «Preferente». El crecimiento del «all inclusive» en Mallorca podría ser incluso mayor, ya que la Conselleria de Turisme todavía no ha chequeado los catálogos de algunos touroperadores italianos y españoles, que podrían representar el 10 por ciento de la oferta.

Los 130 establecimientos explotados bajo la modalidad de todo incluido representan el 8,3 por ciento de la planta hotelera y ofrecen un total de 52.000 plazas, el 18 por ciento de la capacidad de alojamiento hotelero de la Isla.

El director general de Ordenación afirmó que parte del segmento de demanda familiar europea está solicitando esta modalidad de oferta para garantizarse un precio «constreñido» antes que el propio destino, por lo que indicó que la falta de este tipo de hoteles podría provocar una pérdida de clientes en el archipiélago.

Respecto a las críticas vertidas desde la oferta complementaria, que imputan parte de sus pérdidas de facturación al cambio de explotación hotelera, indicó que «hay que desdramatizar» y recordó otros cambios de explotación como la generalización de la media pensión o el bufet.

Aloy informó que las inspecciones impulsadas desde el Govern no detectaron problemas en los servicios ofrecidos por estos hoteles, aunque anunció la creación de un distintivo de calidad voluntaria para los establecimientos que han adoptado esta modalidad de explotación.

El director general de Hotetur, Francisco Gimena, empresa que lleva 10 años explotando hoteles en todo incluido en Mallorca, indicó que «en contra de lo que se cree» los turistas que optan por esta modalidad de oferta son en su mayoría familias con un nivel adquisitivo medio y no bajo.

Gimena indicó que este sistema de explotación requiere de mayores inversiones en instalaciones, así como de un 65 por ciento más de plantilla que los hoteles que trabajan en media pensión. Indicó que el all inclusive genera unos ratios inferiores de rentabilidad en términos relativos pero mayores en números absolutos, mientras que al touroperador le supone un mayor margen que otros tipos de paquetes turísticos.

Eduardo Suárez, gerente de la patronal de Restauración, consideró el crecimiento del todo incluido como «un solución puntual» ante una coyuntura económica desfavorable en los mercados emisores. Destacó que el todo incluido «implica aceptar un bajón del gasto turístico» e indicó que «amenaza la viabilidad de los establecimientos que viven exclusivamente del turismo». Recordó además que uno de los activos de Balears respecto de los destinos competidores es precisamente la oferta complementaria.

Christian Glet, director de contratación de TUI Europa para España auguró un decrecimiento de este tipo de oferta cuando las economías europeas se recuperen.

El president del Govern, Jaume Matas, inauguró el congreso e indicó que la industria turística fue víctima de la «mano negra» que gobernó Balears, refiriéndose al Pacte de Progrés.