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El GOB alertó ayer de que el desarrollo del Plan Territorial posibilitará duplicar el número de viviendas ya construidas en Mallorca. En una rueda de prensa ofrecida por el presidente de la formación ecologista, Macià Blázquez, y el profesor de Geografía de la UIB, Onofre Rullan, los representantes de la organización lamentaron que el Consell aumente las posibilidades de crecimiento de los municipios, cuando el suelo ya clasificado que ya está vacante permite construir hasta cinco veces la demanda de vivienda prevista para 2016, cifrada en 121.011 plazas.

Según los datos ofrecidos por el GOB, en estos momentos existe suelo disponible para construir viviendas con capacidad para 552.893 plazas, cuando la demanda que el Consell ha marcado para 2016 es de 121.011 plazas. Si al suelo ya disponible que aún no se ha urbanizado se suma la capacidad de crecimiento del Plan Territorial, además de las posibilidades del aumento de plazas derivado de un aumento de altura de algunas edificios, las cifras se disparan hasta 1.588.434 plazas, el doble de las 1.411.573 plazas que Mallorca tiene construidas en la actualidad.

Según estas estimaciones, el número actual de plazas se duplicaría hasta llegar a los 3 millones de posibles habitantes en la Isla. Para los representantes de la formación ecologista, el Consell no sólo no debería aumentar la capacidad de crecimiento de los municipios, sino que tiene la obligación de actuar en el suelo vacante ya disponible para limitar el número de plazas.

Los representantes del GOB recalcaron además el hecho de que el aumento de la construcción y el incremento de suelo urbano o urbanizable no está abaratando el precio de las viviendas, que sube año tras año de manera espectacular. «Nadie se plantea la posibilidad de que ordenar el territorio no sea crecer», lamentó Rullan.

Esta situación de crecimiento urbanístico se agravará además, según el GOB, con la política de infraestructuras que está llevando a cabo el Govern, con la ampliación del aeropuerto y la construcción de nuevas autopistas. «Con todas estas propuestas del Govern y del Consell, nos arriesgamos a acabar en un modelo que bascula entre California y Hong-Kong», señaló el representante de los ecologistas.