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JUAN TORRES BLASCO
Balears se «conectará» al AVE a través de la Comunidad Valenciana cuando se concrete uno de los proyectos que ayer exploraron los consellers de Industria de ambas comunidades durante la «cumbre» que celebraron los dos gobiernos y que terminó con un total de treinta acuerdos, entre ellos el de creación de una fundación cultural pública que llevará como nombre Consolat de la Mar y que servirá para profundizar los lazos en común que tienen las dos comunidades maditerráneas. En relación a la propuesta del AVE, y según explicaron fuentes de la delegación balear, los consellers Josep Juan Cardona y Miquel Peralta acordaron que una vez que esté construida la nueva estación con la que Valencia se incorporará a la red de Alta Velocidad, se establecerá una fórmula que permita enlaces rápidos y directos desde el aeropuerto y el puerto para los viajeros procedentes de las Islas. Se tratará de promover algún tipo de tarifas para «viajes combinados» con final en la futura estación del AVE. Sin embargo, la propuesta aún está en fase embrionaria.

Lo importante de la cumbre de ayer, según destacaron tanto el president de Balears, Jaume Matas, como el de la Generalitat de Valencia, Francisco Camps, es que se abren nuevos marcos de colaboración, entre comunidades que tienen mucho en común. La reunión culminó con un anuncio: que la Generalitat distinguirá a Matas con una condecoración, la de Embajador del Reino de Valencia. Camps explicó el galardón en base a la gestión de Matas en el Ministerio de Medio Ambiente y a su gran aportación que fue el Plan Hidrológico.

La cumbre de los dos gobiernos también tuvo un alto contenido político. De hecho, ambos presidentes aprovecharon su encuentro de ayer para contraponer su iniciativa a la propuesta de Pasqual Maragall sobre la Euroregión que toma como base los límites de la antigua Corona de Aragón. En una rueda de prensa conjunta en el Patio Gótico del Palau de la Generalitat, Camps y Matas no desaprovecharon la ocasión de contraponer su «colaboración leal» en el marco de la Constitución con propuestas como la de Maragall, que el president de las Islas considera «irresponsable».