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Dieciseis fiscales sustitutos de Balears acumulan retrasos de hasta dos meses en la percepción de sus sueldos debido a problemas burocráticos en el sistema de pagos por parte de la Dirección General de Relaciones con la Administración de Justicia. Este hecho, que ha generado un gran malestar en el Ministerio Público de las Islas, motivó una intervención directa del fiscal jefe, Bartomeu Barceló. «Me han explicado que esa demora en el pago de los sueldos obedece a cuestiones técnicas que la Dirección General con la Administración de Justicia espera resolver a la brevedad posible», dijo Barceló, quien reiteró que desde Madrid le habían asegurado que «todos los fiscales cobrarán los atrasos acumulados».

Los fiscales sustitutos realizan las mismas labores que los titulares, aunque éstos no tienen ningún problema para cobrar de forma puntual sus respectivas nóminas. Los representantes del Ministerio Público reciben sus emolumentos por cada una de las certificaciones realizadas, ya que de acuerdo al actual sistema de pagos, deben acreditar que han trabajado. «Se está intentando modificar los requisitos de cobros para hacerlos más ágiles e impedir en el futuro que se vuelvan a repetir situaciones como ésta», explicó el fiscal jefe de Balears. Entre esas modificaciones destacan la informatización total del sistema para que esa tarea se realice de forma automática. Barceló, fiscal jefe de Balears desde el pasado mes de julio, pretende solventar el problema de pago de nóminas de los fiscales sustitutos tras culminar una profunda reestructuración de las áreas fiscales. La principal novedad en ese esquema de funcionamiento de las trece áreas fiscales diseñadas por Barceló, es que la Fiscalía General del Estado le ha autorizado para seguir al frente de lo que ahora se denominará Fiscalía Especial Antidrogas, como lo había hecho en los últimos trece años.

El fiscal mallorquín se ha rodeado de personas de su confianza para afrontar las exigencias de un cargo al que, por primera vez en la historia, ha accedido un representante del Ministerio Público nacido en Balears. Su objetivo es recuperar la normalidad en el funcionamiento de la Fiscalía de Balears, repartir el trabajo de la forma más equilibrada posible y aunar criterios, especialmente, tras los momentos álgidos que vivió el Ministerio a raíz de la destitución de Antonio de Vicente Tutor del cargo de fiscal jefe. Barceló, que al iniciar la carrera fue el fiscal más joven del Ministerio Público de España, ha estado al frente durante los últimos trece años (desde 1989) de la Fiscalía Antidroga, y como tal, ha tenido un gran protagonismo en los casos más relevantes en esa materia. Su designación al frente del Ministerio Público de Balears estuvo marcado por la polémica destitución de Tutor, que dejó el cargo por petición expresa de toda la plantilla, que se quejó del trato recibido.