La Guardia Civil investiga la aparición de numerosos vertederos
ilegales de residuos de obra. No se trata de escombros limpios o
inertes, sino de restos de «rechazo», es decir, plásticos y papeles
que normalmente se utilizan para el envasado de materiales de
construcción y que no son reutilizables.
La aparición de estos vertederos ilegales coincide precisamente
con el reciente funcionamiento de estaciones provisionales de
transferencia de escombros en Palma, Calvià, Llucmajor, Manacor,
Artà e Inca, instalaciones con las que se intenta regular y
controlar el vertido o el aprovechamiento (reciclaje y
reutilización) de este tipo de residuos.
El traslado y la descarga de los restos de construcción o
demolición en estas estaciones de transferencia son procesos
sometidos a tarifas, por lo que la creación de nuevos vertederos
ilegales obedecería a la intención de eludir estos pagos. Estos
vertederos ilegales consisten, simplemente, en la excavación de
terrenos para depositar allí los residuos y posteriormente volver a
tapar. Se han detectado numerosos vertederos en el municipio de
Marratxí, pero también han sido localizados en otros puntos de
Mallorca.
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