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En plena canícula se han producido una serie de acontecimientos que van a marcar el resto del verano a nivel turístico y empresarial. Hay nervios, mucha presión y falta «seny».

Escarrer & Mesquida.
En medio del enfrentamiento hoteleros-Govern y de la política de silencio adoptada hasta la fecha... resultan curiosos los contactos que mantienen el presidente de Sol Meliá, Gabriel Escarrer, y el conseller d'Hisenda i Pressuposts, Joan Mesquida. No han sido ni una ni dos las veces que han hablado, sino ya tres los encuentros mantenidos, alguno de ellos a manteles, en los que ambos han analizado todo lo que pasa y puesto encima de la mesa determinadas propuestas y proyectos que no han transcendidos, aunque en concreto uno de ellos puede provocar una auténtica revolución. El verano es largo y habrá saraos en los que el «azar» hará que los dos puedan intercambiar opiniones. El predicamento de Mesquida en el sector empresarial y turístico se cotiza al alza.

Mallorca, ¿destino seguro y con poco ruido?
De enero a mediados de julio el departamento de denuncias de la Jefatura Superior de Policía de Balears llevaba contabilizadas 19.666 denuncias. Y en las zonas turísticas se están incrementando las quejas vecinales por los ruidos nocturnos. Son datos a tener en cuenta en una temporada con menos visitantes y turistas. ¿Por qué se han disparado los robos? ¿Por qué han aumentado los ruidos nocturnos con menos turistas? Son preguntas que los touroperadores se hacen y que los ayuntamientos y autoridad competente tienen encima de la mesa. La imagen de Mallorca está en entredicho.

Campaña de concienciación.
En los últimos días se ha iniciado una campaña de promoción y concienciación a nivel de las Islas promovida por la Asociación Sociedad y Turismo, en la que se quiere poner de manifiesto la realidad y el futuro de unas Islas con menos turistas. El objetivo es mentalizar a la sociedad balear que esta región vive por y para el turismo, de ahí que sus mensajes, los cuales se irán prodigando a lo largo de las próximas semanas, centran su atención en los aspectos negativos que supondrá para la economía insular el hecho de que vengan menos turistas, tal y como propugna el Govern del Pacte de Progrès. La polémica está servida y no extraña que haya una contracampaña. Lo más impactante del caso es que se ha dado por perdida la actual temporada turística y enfocado todos los esfuerzos teniendo la mirada puesta en junio de 2003. ¡Qué once meses nos esperan!.

El «hasta luego» de Antoni Munar.
La marcha de Antonio Munar de la Federación Hotelera de Mallorca ha pillado a todos por sorpresa, aunque había indicios de que «algo» estaba pasando. Las imágenes de un Munar gritando a su presidente Pere Cañellas en unas jornadas de turismo en el Palas Atenea, todavía resuenan. Ha habido cosas que han crispado los ánimos de forma progresiva, hasta el punto de que ya no se discernía bien entre lo que «era» y no «era». Hecha esta salvedad, la trayectoria de Munar en la patronal hotelera ha sido impecable y «muchos» van a echarle en falta. Lo bueno del caso es que los «fontaneros» del Consolat de la Mar se quedan ahora sin argumentos para justificar, explicar y argumentar que uno de los principales escollos para negociar con los hoteleros era Munar. La actitud de Munar deja ahora una puerta abierta, pero la falta de sintonía es absoluta con el titular de la calle Montenegro, que curiosamente también es del mismo pueblo que Munar, Llubí. ¿Empacho de alcaparras?. Todo apunta, aunque falta confirmación, que el sustituto de Antoni Munar será Alfonso Meaurio, que «curiosamente» fue cesado por el conseller Celestí Alomar como responsable del CITIB y el interesado se enteró por la prensa en el transcurso de la feria Fitur de este año.