Los centros sociosanitarios públicos y en concreto las residencias
de la Bonanova y Felanitx, que dependen del Institut Balear d'Afers
Socials (IBAS), y la Llar d'Ancians y la residencia de sa Pobla,
que dependen del Consell de Mallorca, contarán a partir del próximo
mes de septiembre con su propia oficina de farmacia.
Así lo confirmó ayer el director general de Farmàcia de la
Conselleria de Salut i Consum, Joan Serra, quien añadió que «una de
las prioridades de la Dirección General es la de garantizar que los
centros sanitarios públicos contarán con su propia oficina de
farmacia».
Tanto desde el Consell de Mallorca como desde el Institut Balear
d'Afers Socials (IBAS) se ha solicitado al Govern permiso para
instalar las respectivas oficinas de farmacia en las residencias y
«ahora lo único que hace falta es que se acaben los trámites
burocráticos para formalizar el acuerdo», apunta Serra.
La habilitación de las oficinas de farmacia en las residencias
está siendo costeada por el Consell de Mallorca y la Conselleria de
Benestar Social, mientras que el mantenimiento de las citadas
oficinas y el personal será sufragado por Salut i Consum.
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