El capitán madridista cree que la mala temporada debe servirle al Mallorca como toque de atención.

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"Usted es de los que repiten en Mallorca.
"Encuentro en la Isla un lugar tranquilo donde me encuentro muy a gusto.

"¿Y siempre elige la costa este para descansar?
"Me gusta el enclave y por eso repito hasta el hotel, donde nos dan un trato excepcional.

"¿Como turista le toca pagar la ecotasa?
"Sí, es un impuesto con el que hay que cumplir.

"¿Qué cambios ha notado en la Isla, para bien y para mal?
"Vemos que esto cada vez se hace más grande, que hay muchas más construcciones. ¿Lo negativo? Pues Me llama la atención ver que todo está enfocado a los alemanes. Lo bueno es que sigue reinando la tranquilidad y la calma que venimos buscando en Mallorca.

"¿Cuál es la imagen que se te queda del verano?
"Sin duda, la playa. Soy hombre de mar y a veces echo de menos la tranquilidad que me da.

"Cinco bodas el mismo día. ¡Vaya problema! "Fue mucha casualidad que el mismo día se casaran McManaman, César, Carlos (3er portero) y el utillero. Yo opté por no ir a ninguna.

"¿Queda huérfana la selección con su salida, la de Camacho y Luis Enrique?
"No. Este país tiene muy buenos jugadores como para que se resienta la baja de uno. La salida de Camacho es más importante pero estoy convencido de que Iñaki Sáez tendrá mucho éxito en su cargo.

"¿Cree que el problema de la selección era los centrales, como se decía?
"Es cierto que Nadal y yo éramos los más veteranos. Pero lo que hay que ver es que Miquel Àngel ha jugado los 36 partidos de Liga y yo unos 50 contando todas las competiciones.

"¿Qué sabor de boca se le quedó tras el Mundial?
"Malo, porque perdimos una gran oportunidad de hacer algo grande.