Redacción Cultura02/05/02 0:00
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Trasiego de medios de comunicación nacionales y extranjeros por las distintas zonas de la Platja de Palma. Autobuses medio vacíos y con guías explicando a toda prisa el impuesto turístico. Caras de cansancio y sorpresa, pero la excelente climatología y las ganas por dejar maletas y darse el primer baño en la playa obvió cualquier imponderable administrativo en los hoteles. Lo que en principio parecía que iba ser una jornada llena de incidentes en la mayor parte de los hoteles de este popular enclave turístico, se saldó con un día apacible, solariego y con miles de turistas paseando por los distintos balnearios en actitud tranquila y relajante y pasando olímpicamente de la ecotasa. Y es que el día hasta acompañó.

La planta hotelera de la Platja de Palma, en este inicio de la temporada alta y el comienzo del cobro del impuesto turístico, vió cómo su ocupación se incrementó de forma sustancial, que contrasta con la de semanas pasadas, aunque para ello se haya tenido que echar mano de segmentos de mercado turístico que se rechazaban en años precedentes, caso de los viajes de estudios, o las ofertas y descuentos de hasta un 30 por ciento, principalmente enfocadas para incentivar las ventas de reservas en Alemania. Mucho turismo nacional, principalmente del norte y de Madrid, que desconocía absolutamente qué era el impuesto. Este desconocimiento fue casi masivo, salvo en un mercado: el alemán.

Esta claro que el debate político y turístico, que ha provocado enconamientos y crispación entre Govern y hoteleros, se ha convertido en una pugna provinciana que ha sido sobrevalorada, sobreponderada, pero que con tanto vaivén político ha generado un clima adverso antiturístico, antihotelero y con una clara incidencia en la imagen turística de las Islas. La tranquilidad en los hoteles y oferta complementaria en la Platja de Palma, no deja duda alguna de que este 1 de mayo no pasará a la historia por su papel reivindicador, sino por el día en que entró en vigor un impuesto turístico cuyo pago será recurrido masivamente por todos los hoteleros.