El teniente de alcalde de Infraestructures, José María Rodríguez, y
el teniente de alcalde de Urbanisme, Rafel Vidal, criticaron ayer a
la oposición municipal, y en especial al portavoz socialista,
Antoni Roig, denunciando que el convenio de la Façana Marítima
aprobado en 1983 "cuando era alcalde el socialista Ramón Aguiló"
preveía una edificabilidad mucho mayor que la del proyecto
presentado por el actual equipo de gobierno.
«No puede ser que el PSOE pida ahora que todo sea zona verde,
cuando fue este partido, junto con el PSM y el PCE, el que firmó un
convenio con unos derechos urbanísticos», dijo Rodríguez, y añadió:
«Cancelar estos derechos costaría ahora al Consistorio unos 72
millones de euros (12.000 millones de pesetas)».
Por su parte, Vidal dijo que en el actual proyecto la
edificabilidad es mucho menor que en el de 1983, 66.740m2 frente a
82.049 m2, y señaló que confía en llegar a un acuerdo con el
Consell y el Govern por lo que se refiere a la autorización para
soterrar parte de la Autovia de Llevant y para desmantelar Son
Molines, respectivamente. El actual proyecto será presentado en un
pleno antes del verano.
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