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Unió Mallorquina y PSOE han bloqueado la aprobación del anteproyecto de ley que derogaba la ley de campos de golf aprobada durante el mandato del PP. Los nacionalistas han presentado un escrito a sus socios del Pacte de Progrés en el que proponen que la propuesta, presentada por la Conselleria d'Obres Públiques, no sea tramitada. «Es innecesaria», ha justificado el diputado de UM Miquel Nadal. En esta ocasión, la posición de UM ha contado con el apoyo del PSOE. En la última reunión del Pacte, celebrada la semana pasada, los dos partidos comunicaron a sus socios que dicho proyecto de ley no debe ser aprobado por el Govern ni tramitado en el Parlament.

El anteproyecto de ley del Ejecutivo planteaba la necesidad de derogar la ley de campos de golf aprobada en 1988 por limitar el margen de actuación de las administraciones competentes en materia de ordenación del territorio y urbanismo, manteniendo un supuesto interés social para un tipo de instalación «cada vez más cuestionada por buena parte de la sociedad isleña». A pesar de los argumentos esgrimidos por el Govern, UM reiteró su apoyo a la actividad del golf «como complemento a la actividad turística». «Que nosotros sepamos, durante los últimos años no se ha construido ningún campo de golf con oferta complementaria», subrayó Miquel Nadal.

El proyecto del Govern regulaba que los nuevos campos de golf que se ubicasen en Balears deberían ser regados de forma exclusiva con agua depurada. Además, el borrador presentado por el Ejecutivo a sus socios de Govern también prohibía la autorización de oferta complementaria vinculada a campos de golf. «Es una ley innecesaria», recalcó Miquel Nadal. Sin embargo, el diputado de Els Verds Joan Buades ha calificado la postura de sus socios de gobierno de «fuego de artificio». «La derogación de esta ley de campos de golf era una de las peticiones de Els Verds, y es una decepción que no pueda aprobarse en el Parlament. Está claro que ha comenzado la etapa cínica de la legislatura», opinó Buades.

Por otro lado, el PSM pidió ayer públicamente la aprobación por parte del Consell de una moratoria de campos de golf, previa a la redacción del plan director. Los nacionalistas se pronuncian en contra de la construcción de más campos de golf «por el enorme consumo de territorio y agua que comportan». «Además, el PSM considera que la construcción de campos de golf no implica de forma directa acabar con la desestacionalización sino que el problema es mucho más complejo y requiere otras iniciativas», opina la formación nacionalista a través de un comunicado.