Chenoa, junto a Munar, ayer en el CIM. Foto: Julián Aguirre

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Chenoa llegó, con retraso, pero llegó. Y ya es, desde ayer, Chenoa de Mallorca. Hay una Rosa de España y ahora, una Chenoa de Mallorca. Fue llegar a Palma y hacer gala de su mallorquinidad. Que si Mallorca por aquí...que si Mallorca por allá... Aterrizó sobre las once de la mañana en el aeropuerto de Son Sant Joan, allí la esperaban su madre Patricia y su padre Tati. No llegó sola, aunque no acompañada de David Bisbal; lo hizo con un guardaespaldas que no se separa de ella ni un solo instante. Algún que otro fan se acercó hasta el aeropuerto, aunque sin grandes aspavientos y con mucha timidez le pedían autógrafos. Los Corradini, en un automóvil se desplazaron rápidamente al Consell de Mallorca, donde les esperaba la presidenta del CIM, una emocionada Maria Antònia Munar.

Muchas medidas de seguridad, muchos medios de comunicación, pero poca cosa más, ya que fueron pocos los fans que se presentaron en el Consell para ver a la nueva estrella de la televisión española. Tras un breve posado de ambas, Munar y Chenoa, las dos departieron en audiencia por espacio de veinte minutos. Y llegó el turno a los medios de comunicación, que avasallaron con preguntas a la mallorquina. Curioso fue el intercambio de idiomas entre la presidenta del CIM y la concursante de Operación Triunfo. Mientras Chenoa se dirigía a Munar en mallorquín y con total confianza "la tuteaba", ésta le contestaba en castellano. «Estoy muy contenta de estar aquí. Hubiera sido una falta de educación por mi parte hacerme la loca e irme a la playa, pero creo que debía venir aquí a agradecerle a Maria Antònia todo lo que ha hecho por mí. A ella y a todos los mallorquines. Tenía esa necesidad. No quepo en mí misma», fueron las primeras palabras de la nueva famosa.

«Ver las palmeras y cómo el sol me daba en la cara, después de tantos meses metida en la Academia, me ha emocionado. Estic nerviosa, quina expectació. Jo només som una cantant», decía Laura Corradini, que recibió de una niña, que curiosamente también se llama Laura, un ramo de flores. Habló de todo, de su disco, de David Bisbal (para ella «Bisbi» y sólo un amigo), del concierto, una vez más de la Isla y... de la Balanguera, el himno de Mallorca, que prometió cantar si finalmente hay concierto de Operación Triunfo en Palma. «Y si no hay concierto, pues me planto en la plaza de Cort y canto a capela gratis», dijo.

También dio a conocer las diferencias entre la Laura desconocida y la Laura famosa, es decir, Chenoa. «Chenoa es la profesional, la que tira para adelante. Laura es tierna, le gusta fumarse un cigarrillo y estar con los amigos; es mucho más tranquila. Mientras, Chenoa dice tacos, tiene armas y es muy guerrera». La cantante no pudo reprimir las lágrimas al hablar de su «Mallorca, de la sobrassada, de las matances. Le dije a Nina que me sentía mallorquina y lo que estaban haciendo aquí por mí; fue para mí como si me dieran un carnet que ponía que ya era mallorquina. He crecido aquí y así me siento», reiteraba Chenoa, que abandona hoy la Isla sin saber si actuará en Palma. El Real Mallorca ha dado el visto bueno para la utilización de Son Moix el 14 de mayo. Ahora sólo falta que se consigan los suficientes sponsors para garantizar la celebración del espectáculo. No hay nada decidido.