El pasado año Son Sant Joan tuvo 467.332 pasajeros alemanes menos que en 2000

La tendencia a la baja del turismo alemán, fruto de la caída que ha tenido este mercado hacia Mallorca a lo largo de 2001 (solamente hubo un mes donde subió, febrero) tuvo su explicación en la competencia de los destinos del Mediterráneo oriental y a una pérdida de la confianza de este mercado por las informaciones publicadas sobre la ecotasa, huelgas y la mala imagen que se está generando en determinados colectivos hacia el turismo alemán. La Federación Hotelera de Mallorca y los grupos turísticos alemanes coinciden en señalar en que ha habido más noticias negativas que positivas, «esto ha repercutido en el flujo turístico hacia la Isla, de ahí el progresivo descenso del número de pasajeros, aunque también es cierto que a raíz de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos se acentuó».

Tanto es así, que según los datos estadísticos de AENA-Palma en el período septiembre-diciembre el número de pasajeros alemanes descendió un 46% respecto al mismo acumulado de 2000. Esta caída del mercado alemán fue paliada en parte por el alza espectacular del turismo británico, un 7'14% (305.479 pasajeros más que en el acumulado enero-diciembre de 2000), así como la evolución positiva de los mercados alternativos, principalmente el del Benelux y escandinavo.

Son Sant Joan, debido a estos pormenores y a la incidencia negativa del 11-S, finalizó tel pasado ejercicio con un descenso de pasajeros de un 1'06% (205.205 menos que en 2000), al pasar de los 19'4 millones a los 19'2 millones de 2001. Asimismo, el efecto del 11-S también tuvo su repercusión en el tráfico de mercancías vía aérea, dado que el aeropuerto pasó de las 25.211 toneladas de 2000 a las 23.088 de 2001, un 8'42 por ciento menos. Los mayores porcentajes de caída se produjeron en los últimos cuatro meses (más de un 70 por ciento sobre 2000).