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Inmediatamente después, la bella Marie José van der Kolk, cantante, conocida por Loona, apuntó con la pistola de fogueo hacia el aire y disparó. Era la señal, el ¡sus! Y todos comenzaron a cavar en el trozo de playa asignado de no más de cuatro metros cuadrados, debidamente señalizado a fin de que ningún concursante invadiera el terreno del vecino.

Al rato, la berlinesa Regina Schafer lanzó un grito de alegría. ¡Había encontrado el cofre! Lo abrió entre risas histéricas y, ¡helo ahí! En su interior estaba el premio: 100.000 marcos, 8 millones de pesetas. Un buen pellizco sin duda, total por resolver un crucigrama y cavar un ratito. Hubo también un segundo premio de 10.000 marcos, un tercero de 5.000 marcos y 500 marcos para cada participante a fin de que nadie se quedara sin premio.

Como invitados de honor se encontraban en la playa el cantante alemán Jürgen Drews y la susodicha Loona, una ex ticketera en la Platja de Palma, ahora famosa cantante, de cuya producción discográfica se encarga Sammy, del Joy Palace. Amenizaron la búsqueda del tesoro Els Valldemossa, que vinieron con los participantes desde Frankfurt.