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Los ocho ciudadanos nigerianos detenidos el pasado jueves durante la redada que se llevó a cabo en la plaza de España, en Palma, fueron presentados ayer ante el juez y luego quedaron libres. Contra todos ellos la policía presentó datos sobre sus presuntas implicaciones directas en la venta de hachís y cocaína en la citada zona.

Las investigaciones del MIP-E se iniciaron hace dos meses y son la continuación de otra redada que se llevó a cabo en la misma zona el año pasado. A lo largo de los dos meses los agentes han estado siguiendo los movimientos de los sospechosos, a los que se les ha visto contactar con personas que acudían a la Plaça d'Espanya en busca de 'algo'. Después de los contactos, los policías levantaron un total de 30 actas de intervención, en las que se refleja que la misma cifra de personas acababa de adquirir distintas cantidades de cocaína y hachís a los sospechosos.

Con la operación que se llevó a cabo el pasado jueves se da por desarticulado el grupo, aunque no se descarta que el mismo pueda reorganizarse en breve como ya ocurrió después de la primera redada, y mucho más si están de nuevo en libertad. En la redada del pasado jueves participaron efectivos del MIP-E, del subgrupo de motor, de la UPR y de Policía de Proximidad. En principio se detuvo a diez sospechosos pero después de las identificaciones se dejó a dos en libertad. El resto quedó ingresado en los calabozos de la Jefatura de Policía para la practica de diligencias. Después de tomarles declaración, ayer por la mañana los ocho fueron presentados ante el juez del Juzgado de Instrucción de guardia.

La policía sospecha que el grupo de nigerianos que se arrestó el jueves está interrelacionado con otras personas de la misma nacionalidad que se dedican a la prostitución callejera en Palma y Platja de Palma. Un dato 'curioso', es el de que desde hace meses se viene detectando la presencia en el poblado de Son Banya de ciudadanos nigerianos. Hace tres meses que ya se desarticuló a otro grupo de personas de la misma nacionalidad que se venían dedicando a la distribución y venta de sustancias estupefacientes en Palma y Platja de Palma.