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Este próximo martes, en el marco de la Mostra de la Cuina, Ultima Hora otorgará los Coberts de plata, galardones que pretenden premiar la labor de personas o instituciones en pro de la gastronomía mallorquina. Uno de los premios lo recogerá el prestigioso maestro artesano confitero mallorquín Tomeu Amorós, de Cas Nét.

Persona muy conocida por el público, en especial por nuestros lectores, que a lo largo de estos años han podido apreciar el fruto de su artesana labor a través de los típicos dulces de rosarios, panellets, monas de Pascua, y turrones de alta calidad, señaló al serle notificado el galardón que «es un agradecimiento que no merezco porque la verdad, trabajo por amor al arte de la confitería y me siento satisfecho en el día de hoy de que mi obra va a tener continuidad con mis hijos y a lo mejor un nieto que viene de camino». Tomeu suele ser muy reacio a contar anécdotas relacionadas con sus clientes, pero sabemos que a lo largo de estos años ha realizado encargos para las familias más influyentes de la Isla y en muchas ocasiones para la Casa Real.

Su profesión la aprendió de sus mayores, continuándola en el obrador de Cas Nét, confitería muy céntrica que abrió sus puertas al público el día 23 de noviembre de 1965. «Desde pequeño "señaló Tomeu" aprendí todo lo concerniente a los dulces con el sello propio de esta casa, como son los cuartos embatumats, soplillos, coixí de pasta real, gató relleno de yema y el conocido pescado de pasta real. En la actualidad mis hijos me ayudan y por tanto la tradición continúa».

El otro galardonado es el Hostal d'Algaida. Francisca Pizá, una de las propietarias, recibirá el galardón Coberts de plata. Su labor en este reconocido establecimiento de la carretera de Manacor lo comparte junto a sus hermanas, Catalina y Esperanza, desde el 24 de agosto de 1961. «Son 40 años de restauración "afirmó Francisca" dedicados a la cocina mallorquina tradicional. Aunque sea la receptora del premio, en realidad mi hermana Catalina ha hecho muchos méritos, al igual que el equipo que trabaja en casa. Ella es la que está pendiente de la organización en la cocina, mientras que yo me dedico más al restaurante. Me ocupo de los detalles que hagan más confortable la estancia de los clientes y me dedico a atenderles lo mejor que puedo».