TW
0

La espera mereció la pena. Después de tres años de la última puesta en escena de la famosa obra de Pedro Muñoz Seca, el Auditòrium tembló en la noche del jueves con la escenificación por parte de actores aficionados de la obra «La venganza de Don Mendo».

Unas 1.500 personas se acercaron hasta este espectáculo, además de para satisfacer su disfrute personal, para contribuir en una buena causa. Todo el dinero recaudado se destinará al proyecto que está llevando a cabo la Associació Amics de Tilloli para ofrecer una mejor calidad de vida y de educación a las niñas analfabetas de la India.

La fiebre aftosa y las vacas locas fueron dos de los problemas actuales que se introdujeron en la obra de principios de siglo, que provocó risas entre los asistentes.