Los tres concejales del Grupo Municipal del PSM-EN del Ajuntament
de Palma, Sebastià Serra, Biel Barceló y Maria Costa, presentaron
ayer, en el exterior de la antigua prisión de Palma, una
proposición sobre cuál podría ser el destino futuro de este centro
penitenciario ahora cerrado: equipamiento sociocultural. La
proposición será llevada al próximo pleno del mes de abril en Cort.
De este modo, la antigua prisión de Palma podría seguir el camino
iniciado por otros centros penitenciarios del resto del Estado, que
tras haber sido cerrados han pasado a ser centros lúdicos o de
carácter social, como por ejemplo la antigua prisión de
Carabanchel, en la provincia de Madrid.
La antigua prisión de Palma, ubicada en la calle Capità Salom,
en el barrio de Cas Capiscol, figura en el vigente Pla General
d'Ordenació Urbana (PGOU) «como una unidad de ejecución en la que
está prevista apertura de vial, espacio libre y edificaciones
residenciales plurifamiliares aisladas de cinco alturas, con un
total máximo de 103 viviendas», señaló Serra, portavoz del grupo
municipal.
Para Serra, «las barriadas de Cas Capiscol y Camp Rodó ya han
sufrido un importante desarrollo urbanístico en estos últimos años,
y todavía están previstos nuevos desarrollos», indicó. «Entre estos
nuevos desarrollos están principalmente los que afectan a los
cuarteles de la carretera de Valldemossa, que supondrán un
incremento notable de los habitantes así como también un incremento
de las necesidades de equipamientos», añadió Serra.
«Teniendo en cuenta que el actual propietario de la antigua
prisión, Instituciones Penitenciarias, puede llegar a acuerdos
mediante permuta, convenio u otros, con la Administración local con
tal de ceder a ésta las citadas instalaciones, y dadas las
necesidades de locales de reunión para entidades ciudadanas, de
instalaciones juveniles para actividades y de locales de ensayo,
presentaremos dos propuestas de resolución en el próximo pleno»,
concluyó el portavoz del grupo municipal nacionalista.
El grupo del PSM-EN querría conseguir un acuerdo con las
distintas formaciones políticas del Ajuntament de Palma para
dirigirse a Instituciones Penitenciarias con tal de llegar, según
se lee en su proposición, «a un acuerdo para la cesión a la ciudad,
mediante permuta, convenio o cualquier otra solución que se
encuentre oportuna, del solar e instalaciones de la prisión de la
calle Capità Salom, hoy en día prácticamente en desuso». «El
Ajuntament de Palma destinará estas instalaciones a aquipamiento
sociocultural, y prioritariamente a atender necesidades de locales
para jóvenes, para actividades diversas y de reunión», concluye la
proposición.
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