El Consell de Mallorca podría acordar, en última instancia, la
aprobación de una nueva moratoria para salvar las urbanizaciones
que puedan construirse tras la sentencia del Tribunal Superior que
anulaba la protección adoptada en 1998.
Los servicios jurídicos de la Comissió Insular d'Urbanisme están
analizado todos los expedientes de las urbanizaciones que puedan
construirse tras la sentencia. A falta de tener un balance
definitivo de la situación, los servicios jurídicos no descartan
que el Consell Insular de Mallorca se vea obligado a decretar una
nueva moratoria para intentar evitar la construcción de 25
urbanizaciones, que en una primera estimación quedarían reactivadas
con la decisión judicial.
El Consell ya dispone de las competencias en ordenación del
territorio para aprobar cualquier moratoria sin la necesidad de que
el acuerdo sea autorizado por el Govern. Los servicios jurídicos y
técnicos del Consell y los del Govern están cotejando la
información disponible para analizar la situación que provoca la
sentencia del Tribunal Superior. Para el Govern, la decisión
judicial sólo permitiría la construcción de 11 urbanizaciones,
según una primera estimación. El Consell da por hecho que puedan
edificarse dos urbanizaciones en el término de Campos y Son
Ferrandell, en Valldemossa. Del resto de urbanizaciones hasta
llegar a las 25 se está a la espera de la información que faciliten
los ayuntamientos para conocer el grado de desarrollo de los
proyectos.
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