JAVIER RODRÍGUEZ09/01/01 0:00
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El presidente y el secretario general de Asaja-Balears, Fernando Dameto y Gabriel Company, pidieron ayer al president del Govern, Francesc Antich, «más reconocimiento y respeto» por su labor ya que, según sus datos, representan al 90 por ciento del sector agrícola de las Islas y algunos miembros del Ejecutivo no les tienen «en cuenta a la hora de tomar decisiones». Estas afirmaciones fueron realizadas tras la audiencia oficial que Antich ofreció a la nueva junta directiva de la organización agrícola, encuentro en el que también participó el conseller del ramo, Mateu Morro.

Para Dameto y Company el Govern balear les ha mostrado «varias caras», la buena, aseguran, corresponde al propio Morro «que nos ha escuchado y ha atendido a las peticiones de las organizaciones» mientras que la mala corresponde a Pere Sampol, «por poner en marcha iniciativas como la cooperativa para comprar grandes cantidades de gasóleo contando sólo con sus organizaciones afines, que son minoritarias» y a Margalida Rosselló, «por intentar imponer parques naturales sin tener en cuenta la propiedad privada y sin querer hablar con nosotros».

«Le hemos comentado a Antich que no queremos que el Govern nos 'ningunee' por que representamos a una parte importante del sector y también nos hemos quejado de la falta de una política agraria autonómica definida y efectiva», aseguró el presidente de la organización agrícola. A pesar de la críticas el encuentro transcurrió con relativa cordialidad y la junta directiva de Asaja-Balears se ofreció al líder del Ejecutivo y al conseller «para colaborar en la recuperación del tejido agrícola de las Islas».

En este sentido Dameto recordó que en los últimos años han desaparecido el 70 por ciento de las explotaciones agrarias de las Islas y que es necesaria la implicación de todas las partes implicadas para relanzar el sector. Por su parte, el conseller volvió a garantizar la carne de vacuno que se consume en la Isla ya que se cumplen todas las garantías de control y anunció que se pondrá en marcha un laboratorio específico en el que se invertirán algo más de 80 millones de pesetas.