El progresivo y preocupante incremento de la edad media de los
agricultores y ganaderos de la Isla que desarrollan su trabajo a
título principal, (la mayor parte de sus ingresos proviene de la
actividad agrícola), ha puesto en alerta a la Conselleria
d'Agricultura i Pesca y ha forzado la aprobación de un plan, por
parte del Govern, para favorecer la incorporación de jóvenes al
sector como propietarios de sus propias tierras.
La presión de otros sectores productivos, como son la
construcción y turismo, ha provocado la «huida» de los más jóvenes
hacia trabajos mejor remunerados y, por tanto, que la edad media de
los payeses de la Isla esté situada, actualmente, en torno a los 54
años.
Para evitar este envejecimiento de la población activa la
conselleria está dispuesta a subvencionar con 2'5 millones de
pesetas a aquellos payeses menores de 40 años que quieran
instalarse en la actividad agraria como titulares, cotitulares o
socios en una explotación prioritaria. Esta ayuda, según fuentes de
Agricultura, podrá llegar hasta 4.159.650 pesetas si las
inversiones que realice el joven son generadoras de puestos de
trabajo o si son «para la adquisición de tierras, la incorporación
de nuevas tecnologías que faciliten su actividad, la
diversificación de la producción o la adquisición o adecuación de
una vivienda».
El objetivo de la conselleria es lograr la incorporación de, al
menos, 30 titulares de explotación al año gracias a esta línea de
subvenciones. Por su parte los payeses que reciban las ayudas deben
comprometerse a mantener la actividad agrícola durante cinco años
como mínimo y demostrar capacidad profesional o comprometerse a
adquirir los conocimientos necesarios en el plazo de dos años.
Asimismo, en el pliego de condiciones se establece que el receptor
de las ayudas debe mantener o fijar su residencia en la comarca, o
comarcas limítrofes, donde esté la explotación.
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