El traspaso de las competencias en carreteras era uno de los compromisos del acuerdo programático del Pacte.

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La Conselleria d'Obres Públiques y el Govern tienen ya cerrado el acuerdo para ceder las competencias en materia de carreteras a los consells insulars. La cesión tan sólo está a la espera de que los presidentes de las respectivas instituciones firmen el acuerdo y el Consell de Govern apruebe el proyecto de ley de transferencias para remitirlo al Parlament. En virtud de este acuerdo, los consells recibirán 6.600 millones de pesetas durante los tres primeros años tras la firma del acuerdo. De estos 6.600 millones, el 76 por ciento de la inversión corresponderá al Consell de Mallorca y el 24 por ciento restante se repartirá a partes iguales entre los consells de Menorca y de Eivissa i Formentera.

No es ésta la única cantidad que ingresarán los consells tras la firma del acuerdo con el Govern. A partir del tercer año de la aplicación del acuerdo, los consells recibirán además 2.000 millones de pesetas, que se repartirá en el mismo porcentaje, en concepto de inversiones adicionales. Durante los tres primeros años estos 2.000 millones de inversiones los ejecutará el Govern de forma directa.

Una de las grandes cuestiones que se han debatido durante toda la negociación ha sido dilucidar a qué institución corresponde realizar las obras previstas en el convenio de carreteras y que debe ser renegociado con el Ejecutivo. En virtud del acuerdo, al que sólo le falta la firma de los presidentes, será el Govern quien ejecute las obras previstas en el convenio. De esta forma se salva la complejidad jurídica que significaría ceder las obras a los consells, cuando el dinero debe aportarlo el Gobierno a través de este convenio firmado con el Govern.

Sin embargo, una vez que las obras que contempla el convenio estén finalizadas, todas las carreteras se cederán a los respectivos consells insulars, incluidas las autopistas actuales y los desdoblamientos que pueden ejecutarse a partir de ahora. De esta forma se evitará la duplicidad en la titularidad de las carreteras que ha existido hasta la fecha.