TW
0

Un apasionante viaje por el mundo de la pareja. Ésta es la idea por la que apuestan conjuntamente las compañías En Blanc y Res de Res en su última obra, «Ícars». Este nuevo trabajo es un recorrido por las distintas fases de la vida sentimental. La pasión, el amor, el desencanto, la indecisión y la sensualidad se entremezclan en una puesta en escena original e innovadora. Un tema bastante típico pero tratado con una frescura y libertad nueva y dinámica.

El único lenguaje que se utiliza para reflejar estos sentimientos es el gestual. Es una mezcla de dos estilos totalmente distintos: el del circo y el teatral. Todos los movimientos que se realizan en el espectáculo tienen un significado concreto. No es la técnica por la técnica, sino que todo está integrado en el tema principal. Un trapecio, unas cuerdas, unas telas y un baúl son los complementos decorativos que se utilizan. Con esta escenografía tan simple se pretende dar mayor importancia a los movimientos gestuales, que son el centro de la obra.

Este trabajo se estrenó el pasado mes de febrero, y desde entonces ha tenido una excelente acogida por parte del público. Distintos festivales como el de Valladolid, Vilanova, Reus o la Fira de Teatre de Manacor han sido algunos de los escenarios que han acogido esta propuesta. Ahora, como era de esperar, esta idea original ha tenido su recompensa. «Ícars» ha conseguido ganar el Proyecto Alcover y a partir del próximo mes de enero iniciará su personal gira por los Països Catalans.

Este proyecto escoge cada año un grupo teatral balear, uno catalán y otro valenciano. Estos tres grupos realizan una gira por estas tres localidades. Un total de 22 ayuntamientos están inscritos en este proyecto. De esta manera, este grupo tiene aseguradas 22 actuaciones, que les dará a conocer fuera de las Illes Balears. La finalidad principal de este proyecto es intentar unir la cultura balear, catalana y valenciana, que tan relacionadas están por una lengua común. Marta Barceló y Biel Jordà están solos ante el peligro. Ellos son los dos únicos actores que intervienen en la obra, además del músico Nacho Vegas, miembro de la Gran Orquesta Republicana, que les acompaña en algunas escenas. Ambos coinciden en resaltar que su triunfo se debió fundamentalmente a la originalidad y a la calidad de esta apuesta.