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La Conselleria de Sanitat i Consum del Govern balear ultima un decreto que regulará la ordenación hospitalaria en la Comunitat Autónoma. Ya antes de su aprobación la futura normativa ha levantado los recelos y preocupación de los hospitales, especialmente privados, que deberán adaptarse a ella con más o menos problemas.

Y es que no es lo mismo edificar y poner en marcha un hospital siguiendo unas directrices ya marcadas que adaptarse a ellas una vez ya se hecho y cuando los problemas estructurales del edificio pueden complicar el llevarlas a cabo. En las Islas existen un total de 24 hospitales de los que 15 son privados. Esta normativa tenía que haber sido abordada inmediatamente después del decreto de agosto de 1996 que regula la autorización para la creación, modificación, traslado y cierre de centros, establecimientos y servicios sanitarios. Sin embargo, no se llevó a cabo "presuntamente por la presión desde las clínicas privadas y también públicos" y es ahora cuando se ha redactado. Sí en cambio se aprobó la normativa de centros sanitarios no hospitalarios.

Esta normativa que regula la autorización, apertura, traslado y cierre de los hospitales llena un vacío legal que provocaba las quejas por indefensión de los hospitales ya que era la inspección sanitaria la que marcaba los requisitos según sus propios criterios (entre ellos las normativas de otras comunidades). En estos momentos, ésta orden de mínimos ya ha sido remitida al sector sanitario que han remitido alegaciones "precisamente no han sido pocas" que ahora están en estudio. Se quiere que ya en el mes de septiembre pase el trámite del Consell Consultiu. Luego tendrá que ser aprobado por el Consell de Govern.