Palma ya dispone de 3.500 metros cúbicos más de agua desalada al
día. El president del Govern, Francesc Antich, inauguró ayer la
puesta en funcionamiento de las cinco desaladoras móviles en un
acto multitudinario al que asistió buena parte de su gabinete,
además del presidente del GESA, Bartomeu Reus, y de Angel
Fernández, gerente de la empresa Tirme. Esta empresa ha sido la
encargada de construir las cinco unidades de desalación en un
tiempo récord de 45 días.
El president aseguró que la puesta en marcha de estas
desaladoras le hacen sentirse «especialmente orgulloso» porque
demuestra que el Govern está avanzando en la solución de los
problemas ciudadanos. Antich destacó que estas instalaciones se han
podido construir gracias a la colaboración entre el Govern y los
ayuntamientos de Palma, Calvià y Andratx y además se mostró muy
satisfecho de anunciar que la línea de reserva de la desaladora
fija de Palma, que aportará otros 7.000 metros cúbicos diarios a la
red, entrará en funcionamiento el día 17 de esta mismo mes.
El president aprovechó además el acto de inauguración de estas
nuevas desaladoras para exigir al ministro de Medio Ambiente, Jaume
Matas, que cumpla sus compromisos con Balears y firme de una vez
por todas el convenio por el que el Gobierno se compromete a
invertir 21.000 millones de pesetas en infraestructuras hidráulicas
en las Islas. El president aseguró además que Matas pone excusas a
la hora de no subvencionar las desaladoras móviles, y opinó que no
existe ningún impedimento para que sean declaradas de interés
general. Antich aseguró además que la UE no se opone a financiar
estas desaladoras, en contra de lo que asegura Matas.
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