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Si la vieja canción decía que veinte años no es nada, la verdad para Ultima Hora es que las dos últimas décadas han significado mucho. Desde 1980 la carrera de liderazgo de este diario ha sido imparable y si entonces se difundían 21.319 ejemplares, en la actualidad esa cifra supera los treinta mil y alcanza casi los 50.000 los domingos. Resulta fácil decirlo, pero lo cierto es que detrás de los números hay un largo camino de trabajo, de esfuerzo y de innovaciones, de apuestas arriesgadas, de decisiones y, sobre todo, de una enorme vocación por el periodismo, por la información y, por qué no, por el entretenimiento. Y ahí precisamente está la clave del éxito de Ultima Hora y de todas las publicaciones que le han acompañado a lo largo de todo este período: informar sin abrumar, de una forma clara y diáfana, con independencia y tratando de reflejar la realidad de un Archipiélago que evoluciona constantemente.

Por eso nuestro diario ha ido incorporando a su oferta informativa toda una serie de complementos que han conseguido satisfacer a nuestros lectores: desde «La Gran Enciclopèdia de Mallorca» hasta el más reciente «Die Balearen» en catalán, nuestros más emblemáticos y ambiciosos proyectos culturales, pasando por los suplementos semanales, las revistas del fin de semana, y nuestros populares concursos. Desde los bingos al Frutijuego.

Pese a ello, Ultima Hora no se detiene. Los retos informativos forman parte de nuestra personalidad y a la puesta en marcha de las ediciones de Eivissa y Formentera y de Menorca, se han unido también las ediciones digitales de nuestro diario en la red Internet. De cara al futuro son muchos los proyectos que se debaten y los que ya se están convirtiendo en realidad, como la adquisición de una rotativa de última generación que posibilitará que nuestro diario alcance las 128 páginas. Todo un logro que sólo tiene un compromiso: continuar cumpliendo las expectativas que nuestros miles de lectores ponen cada día sobre nosotros. Porque a ellos les debemos nuestro éxito y a ellos se lo dedicamos. Día a día.