La Casa de la Iglesia acoge desde ayer la exposición «Una ruta de
solidaridad», con motivo de la conmemoración del 40 aniversario de
la organización no gubernamental católica Manos Unidas, inaugurada
ayer por su presidenta María Ignacia Chacartegui y el obispo de
Mallorca, Teodor Úbeda.
Previa a la inauguración de la muestra, el Obispo presidió una
eucaristía en la capilla de Sant Pere.
La muestra consta de dieciséis paneles con fotografías que proponen
un viaje a través del mundo, en el que se pueden ver distintas
experiencias de trabajo, vidas e iniciativas. La exposición
demuestra que es posible que se den alternativas justas y
solidarias ante realidades de intolerancia, exclusión o
subdesarrollo.
La historia de Manos Unidas comenzó en 1960 de la mano del grupo
de mujeres de Acción Católica que decidieron afrontar el reto de
intentar mejorar las condiciones de vida de los países del Tercer
Mundo. Estos cuarenta años de trabajo representan 17.222 proyectos
financiados en más de 60 países de Àfrica, Asia, América Latina y
Oceanía y 70.000 millones de pesetas recaudados.
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