MIQUEL BAUÇÀ27/02/00 0:00
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Una sociedad integrada básicamente por capital alemán ha presentado ante la Conselleria de Medi Ambient, el Consell Insular de Mallorca y varios ayuntamientos un proyecto para tratar los residuos sólidos urbanos a partir de la gasificación de los mismos. El gas resultante del tratamiento de las basuras puede ser utilizado posteriormente como combustible para la producción de energía eléctrica, a su vez utilizable para la producción de agua en una planta desaladora.

La sociedad International Trade Forum Europe (IFE), integrada por varias empresas europeas, pretende incorporar a Son Reus (Palma), donde actualmente se incinera buena parte de las basuras producidas en Mallorca, una planta con el sistema Arlis, consistente en una técnica de gasificación de residuos capaz de transformar los desechos en energía (un gas similar al natural) y un tipo de piedra parecido al basalto o al granito que una vez enfriado puede ser utilizado como material de construcción y en el asfaltado de carreteras.

Para obtener estos dos productos, las basuras son tratadas dentro de un reactor a una temperatura superior a los 1.200 grados centígrados. J. F. Johannsen, presidente de IFE, apunta que no todos los materiales que actualmente se reciclan merecen ser recuperados debido al alto coste económico que implica su reutilización. «La ecología y la economía deben estar equilibrados», asegura, para agregar que el sistema Arlis puede tratar materiales con elementos contaminantes sin ningún peligro porque no se emiten gases a la Atmósfera.