Los transportistas de escombros continuaron durante casi todo el
día de ayer concentrados con los camiones en las Avenidas de Palma,
ante la Conselleria de Medi Ambient, pendientes de llegar a un
acuerdo tras la prohibición de llevar los vertidos, a partir del 1
de febrero, a Son Reus.
Los transportistas propusieron al director general de Residus i
Energia, Nicolau Barceló, llevar los escombros a la cantera de Can
Set, en el término municipal de Llucmajor, una explotación que se
encuentra al inicio de la carretera de Llucmajor. La cantera
propuesta tiene una parte activa y otra inactiva donde se podrían
verter los escombros. De hecho, el propietario está de acuerdo en
establecer un convenio con los transportistas afectados para el
vertido de escombros.
Fuentes de la Conselleria de Medi Ambient indicaron a
Ultima Hora que a la Direcció General de Residus
le parecía bien esta ubicación, aunque tendrá carácter provisional
hasta encontrar el espacio definitivo. Las mismas fuentes
precisaron que los transportistas deberán llevar a cabo los
trabajos de selección de los residuos antes de verter los escombros
en Can Set.
No obstante a última hora de la tarde ayer y tras otra reunión
mantenida entre los dirigentes de la Asociación de Transportistas
de Contenedores de Mallorca (Astracoma) con el director general de
Residus, no se dio por zanjado el problema. Joan Sastre, presidente
de Astracoma, aseguró que en la Conselleria los técnicos
continuaban estudiando posibles ubicaciones para el vertido de
escombros. «Se ha por sentado que se tiene que llegar a una
solución, pero de momento no se ha definido el lugar. Mañana (hoy
para el lector) tendrán que plantear una zona donde podamos ir»,
precisó.
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