TW
0

Los nuevos superferries que Trasmediterránea destinará a Balears serán los mayores buques de pasaje y carga en la historia naval española.
Ambas unidades, actualmente en construcción en Astilleros Españoles y en Hijos de J. Barreras por un importe, cada uno de ellos, de 13.000 millones de pesetas, entrarán en servicio en el 2001. La financiación se hará en un 20 por ciento con recursos propios de la compañía y el 80 por ciento restante con un crédito sindicado.

Según ha informado el delegado de Trasmediterránea, Jesús Àlvarez, a Ultima Hora las dos unidades, equiparables por sus instalaciones a buques de crucero, reducirán en más de dos horas el trayecto entre la Península y Balears. Así, alcanzarán una velocidad de 23 nudos en las líneas Palma-Barcelona y Palma-Valencia. Poseerán una capacidad de 1.800 metros lineales de carga rodada en tres cubiertas, (frente a los 500 metros que poseen los actuales buques tipocanguro). Asimismo, tendrán cabida para 166 vehículos, capacidad ampliable hasta 330 mediante entrepuentes móviles que pueden ser utilizados cuando sea necesario.

Los dos superferries, de idénticas características, podrán alojar a mil pasajeros en clase club y turista, de los cuales 748 plazas estan distribuidas en camarotes, seis de ellos para discapacitados. Entre sus instalaciones, dispondrán de amplios espacios públicos con salón de video tipo cine, bar cervecería, sala de lectura, comedor a la carta, cafetería autoservicio, cafe-pub, discoteca, gimnasio, tienda, zonas de video juego para niños, guardería, zona de juego para adultos y perreras con zona de paseo en el exterior.

Como novedad en la flota mercante nacional, serán los primeros buques en disponer de una piscina cubierta climatizada con techo móvil, que se descubre en verano. Las dimensiones de cada buque son 172 metros de eslora total, 26'2 de manga y 6'2 de calado.

Una vez en servicio ambas unidades, los actuales buques del tipo canguro, cuya primeras unidades procedentes de Ybarra & Cía, entraron en servicio en 1972 y 1976, pasarán a cubrir líneas secundarias y con menor demanda de carga rodada. Como las del Estrecho y entre Barcelona, Maò y Eivissa.