El nueve de marzo de 1962, a las cuatro de la madrugada, moría Joan March Ordinas "Verga" en su palacio madrileño de la calle Núñez de Balboa, a consecuencia del accidente de automóvil que sufrió el 26 de febrero del mismo año. Fue en la Catedral de Palma donde se celebró la solemne misa en sufragio del alma del ilustre financiero. El templo se llenó totalmente de fieles y una multitud llenaba las aceras de la calle Goded frente al Palacio March.
A las seis de la tarde fue transportado a hombros, por empleados de la Banca March, el féretro que contenía los restos mortales. El obispo de Mallorca, D. Jesús Enciso Viana, ofició la ceremonia, acompañado del Cabildo y clero catedralicio. La fotografía, del archivo de Planas Montanyà, fue tomada en el interior de la cripta donde el féretro fue depositado, frente al altar. En el partenón habían sido colocados lirios, gladiolos y claveles blancos y amarillos.
Se procedió al entierro dirigiendo la operación el arquitecto de la casa, D. Gabriel Alomar Esteve. Estaban presentes además de los familiares, el Ajuntament en comisión, presidido por el alcalde D. Juan Massanet, D. Plácido Alvarez Buylla "jefe provincial del movimiento"; el presidente de la audiencia territorial, D. Fermín Garvayo; el presidente de la diputación provincial, D. Rafael Villalonga; el director de la Real Academia, Ramón Menéndez Pidal; etc. Murió el hombre y nació el mito.
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