TW
0

El Govern aprobó ayer un anteproyecto de ley de medidas cautelares y de emergencia para frenar la presión urbanística que sufre Balears durante los últimos meses. El Ejecutivo presentará en el Parlament dicho proyecto como una ley de lectura única, un sistema que los actuales miembros del pacto de progreso criticaron con dureza cuando fue aplicado por el gabinete de Jaume Matas para aprobar la moratoria turística. Los partidos políticos que ahora están en el Govern alegaban que una ley por lectura única sólo debe plantearse cuando existe consenso. El president Francesc Antich calificó de «necesidad» la aprobación de esta ley urgente.

Este proyecto legislativo, que podría ser aprobado por el Parlament dentro de dos semanas, pretende prohibir el uso edificatorio de la vivienda unifamiliar aislada en la totalidad de las áreas naturales de especial interés (ANEI) y en la franja de suelo rústico de 500 metros en las islas de Mallorca, Menorca y Eivissa y 100 metros en el caso de Formentera. Además, dicho proyecto de ley suprime las excepciones para construir en suelo rústico en terrenos con superficies inferiores a 14.000 metros y superiores a los 7.000 metros. Con esta ley se suprimen las excepciones en Mallorca y se eleva a 14.000 la superficie mínima en las Pitiusas.

Otro de los aspectos importantes de esta ley es la eliminación de algunas excepciones incluidas en la disposición transitoria sexta de la DOT. Las excepciones que se eliminan son la construcción de un campo de polo en Campos y el proyecto de puerto en Ciutadella. Sin embargo, no protege es Canons, lo que ha provocado cierto malestar en algunos socios del Govern. El PSM y EU esperan que la protección de es Canons se concrete cuando se presente la modificación definitiva de las DOT.

Asimismo, la ley de lectura única promovida por el Govern de Francesc Antich suspende la efectividad de los usos edificatorios destinados a vivienda unifamiliar de las parcelas de suelo rústico segregadas con posterioridad a la entrada en vigor de la Ley de Suelo Rústico.

El jefe de la oposición, Jaume Matas, criticó a Francesc Antich «por no actuar como un presidente prudente» al presentar esta modificación de las DOT y de la Ley de Suelo Rústico. «Se pueden adoptar medidas transitorias con una ley de lectura única, pero es un atropello ordenar el territorio con esta fórmula parlamentaria», opinó el ex presidente del Govern. Matas lamenta la avalancha de solicitudes para construir en Balears y lo achaca «a las declaraciones realizadas en los últimos meses por los integrantes del pacto».