Las quejas por las deficiencias en el servicio nocturno de la
Policía Local de Palma es una constante histórica que se repite
cíclicamente, a medida que se van sucediendo los responsables
políticos y profesionales, sin que hasta el momento el ciudadano
haya podido percibir una mejora. Son demasiados los casos en los
que se requiere la intervención de los agentes locales sin que la
llamada reciba la que debería ser lógica satisfacción, puesto que o
no se presentan o lo hacen tarde.
José Manuel Sierra, nuevo concejal responsable de la Policía
local, explicó ayer a Ultima Hora que durante
estos primeros días de mandato está estudiando la organización de
este servicio para adecuarlo a las verdaderas necesidades del
ciudadano. «El servicio nocturno es una de esas preocupaciones y
por esto la pasada semana estuve toda la noche haciendo la patrulla
para ver como funcionaba. En dos horas acudimos a un accidente, un
incendio y a un apuñalamiento de una persona. Siempre se da
prioridad a los casos más graves y se atiende antes una emergencia
de alguien que llama porque ha padecido un accidente que a otra que
se queja de que un perro ladra».
Sierra explica que pretende potenciar la figura del policía de
barrio, que atienda más directamente al ciudadano y escuche las más
pequeñas quejas. Al replicarle que eso mismo es lo que vienen
repitiendo sus antecesores sin que, realmente, el ciudadano lo
perciba, por mucho que las estadísticas digan lo contrario,
responde que «el problema es que al policía local le gusta hacer de
policía y realizar intervenciones importantes, por eso pretendemos
que se cambie esa mentalidad y se derive a la atención al
ciudadano».
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