TW
0

La modelo Inés Sastre pasa unos días en Mallorca, disfrutando con unos amigos en alta mar. Ayer, poco después del mediodía, Borja, el director del Club de Mar, destapó su embarcación, una preciosa y reluciente Riva, se quitó la camiseta y se «rebozó» de bronceador. Minutos después apareció Àlvaro de Marichalar y tras él la preciosa Cristina Valls Taverné, hija del presidente del Banco Popular. Antes de la llegada de Inés al Club de Mar, Borja avisó a los de seguridad de que había unos fotógrafos esperando a la modelo. Al instante aparecieron un miembro de seguridad y un Guardia Civil, que mostraron una fotocopia de un reglamento que impedía estar en la zona, según ellos privada para algunos, concretamente para los periodistas. En esos momentos Inés, acompañada por unos amigos, pasaba ante los fotógrafos, ignorante de cuanto ocurría.

Una vez todos en la barca, menos Àlvaro de Marichalar, salieron rumbo a una bonita cala de Santa Ponça. Borja demostró a sus invitados la velocidad que podía alcanzar la embarcación "la Riva es considerada como el Rolls del mar" e hizo rugir el motor a fondo. La tarde transcurrió entre baño y baño, bronceándose la piel y hablando por el móvil, sobre todo Cristina Valls. Inés Sastre lució un bañador color rojo y disfrutó lanzándose de cabeza al agua. En cambio, los tres hombres que acompañaban a las chicas en su paseo por la costa mallorquina no pusieron un solo pie en el agua. Al atardecer, regresaron al puerto de Palma. Inés, simpática y sonriente, nos aseguró que pasará unos días en Mallorca disfrutando del sol y de la noche por Puerto Portals, acompañada de sus amigas, que son muchas las que tiene la modelo en Palma.