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Se llama Joanna Prince, nació en Berlín hace 19 años y estudia para dirección de empresas. Le gustaría dirigir empresas e incluso trabajar en la bolsa. En su tiempo libre lee libros de suspense e investigación. Le encanta estar tranquila junto a la piscina del hotel y leer o charlar con las amigas. Es la primera vez que viaja hasta Mallorca y no descarta volver el próximo año, aunque piensa que es algo cara la estancia y las comidas, «sobre todo, "comenta" si pasas de los bocadillos y las hamburguesas. Me gusta mucho la gastronomía mediterránea». Uno de los lugares que más le ha cautivado a sido Deià, Valldemossa y Formentor. Lo que más le ha impresionado es la catedral y lo que peor de este viaje ha sido la imagen de las claveleras y carteristas en la playa. También protesta por el servicio en algunos restaurantes y por los contenedores de basura que, según su parecer desprenden mucho olor y suciedad. Por el contrario, Mallorca tiene un gran entorno natural que la hace realmente bella.