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JUANMA RUBIO Una delegación de la ONG Veïns Sense Fronteres se desplazó a Guatemala con motivo de la inauguración y puesta en funcionamiento de la primera escuela de formación de bomberos y de población civil en la localidad de Chimaltenango.

Los miembros de la delegación, Francisca Pons y Jaume Obrador, participaron en la ceremonia de inauguración, que tuvo lugar el pasado 19 de junio, y regresaron a España al día siguiente. Durante su estancia en la localidad guatemalteca, aprovecharon para revisar los últimos detalles de la dotación de la escuela, elaborar el documento de creación oficial de esta, y redactar y firmar su Reglamento de Funcionamiento interno, siempre buscando el consenso con Bomberos sin Fronteras (BSF) y los Bomberos Voluntarios de Guatemala (BVG), que colaboraron activamente en el proyecto.

El objetivo último era dejar la escuela en perfecto funcionamiento; Para ello, realizaron una planificación global de todo lo que faltaba, y llevaron a cabo un seguimiento exhaustivo para que todas las tareas se pudieran realizar en un plazo de tiempo determinado.

La colaboración entre Veïns Sense Fronteres y Bomberos Sin Fronteras fue muy positiva: Francisca Pons, de VSF, se encargó de la planificación y coordinación de todo el conjunto, mientras que, por parte de BSF, Carlos Utrera se encargó de la resolución directa de los problemas logísticos de la escuela. Además, los miembros de BSF permanecieron en Chimaltenango hasta el 24 de junio para impartir el primer curso de formación de bomberos en el edificio de la nueva escuela.

La inauguración de esta escuela supone la culminación de un proyecto que nació en 1997, con la llegada de la primera delegación de VSF a Guatemala. A raíz de este viaje, cuya finalidad era realizar una prospección para una posible cooperación para el desarrollo, se sentaron las bases de la construcción de la escuela. En 1998, una segunda delegación comenzó la construcción del edificio e inició los contactos con diversas ONG de Chimaltenango. Finalmente, el grupo que antecedió a la última delegación se encargó del seguimiento de las obras y de la verificación de las posibilidades de participación de bomberos en la gestión de la escuela.