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Los jueces de la Audiencia de Palma deliberaron ayer sobre los recursos contra el archivo del «caso Calvià» presentados por el PSIB-PSOE y el Ajuntament de Calviá. La resolución se conocerá en los próximos días y afectará a una causa iniciada en 1992 y reabierta en 1996, con un extenso sumario que, incluso, fue sustanciado en el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB), aunque finalmente recayó en un juzgado de lo Penal de Palma. El tribunal que estudió ayer los recursos estuvo integrado por los magistrados Antoni Terrasa (presidente), Margarita Beltrán y Pedro Illanes. Se da la circunstancia, que Margarita Beltrán ya formo parte del tribunal que se pronunció sobre el caso en 1993.

El titular del Juzgado de lo Penal número dos de Palma, Javier Mulet, decidió archivar el «caso Calvià» el pasado mes de enero al estimar las peticiones formuladas por los abogados de Francesc Gilet y Eduardo Vellibre, Antoni Monserrat y Javier Clastres, respectivamente, y del fiscal, que defendían la tesis de la prescripción. El juez redactó un auto demoledor para los instigadores del «caso Calvià»: «Repugna a la ciudadanía la forma, torticera e incluso chapucera, con la que se intentó el cambio gubernamental en el Ayuntamiento de Calvià, por cuanto supone de cercenación y desconfianza hacia los principios democráticos y fraude del sistema electoral», señalaba el juez.