La dimisión en bloque de los miembros de la Comisión Europea
sorprendió ayer a los miembros del Govern balear que, de una forma
u otra, tienen relación con esta institución comunitaria.
Una de las principales preocupaciones se centró, durante el día
de ayer, en las consecuencias que el hecho va a tener en el
preacuerdo de la reforma agraria europea, acuerdo suscrito por los
ministros de Agricultura comunitarios, y que estaba amparado por la
comisión ahora disuelta.
El episodio de la dimisión fue calificado por el conseller de
Agricultura, Josep Juan Cardona, como «muy grave» dado el
desprestigio político que conlleva. Aun así, la crisis en la
Comisión Europea, según Cardona, «no tiene por que afectar a la
reforma de la política agraria».
El titular de Agricultura argumenta que el acuerdo surgió de un
consenso entre los respectivos ministros de los Quince y que «este
pacto está por encima de la propia comisión». Por otra parte,
asegura, «los motivos que han provocado la dimisión en bloque de la
comisión no tienen nada que ver con la reforma agrícola».
Estos dos argumentos, afirma Cardona, «nos hacen pensar que la
Reforma de la Política Agraria, que fue aceptada por la gran
mayoría de los países, no sufrirá cambios significativos».
Respecto a la influencia que dicha reforma tendrá en Balears, el
conseller de Agricultura aseguró que, en conjunto, «será muy
beneficiosa para el campo de las Islas».
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