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Tomás Darder vivirá su primera Semana Santa como presidente de la Asociación de Cofradías.
«En la remodelación de junta "señala el presidente" no hemos encontrado demasiada oposición, en cuanto a que las últimas elecciones fueron lo suficientemente claras.
"Al ser ustedes nuevos en esta actividad, ¿se han encontrado con muchas pegas?
"Siendo inexpertos nos hemos topado con más pegas, aunque de carácter organizativo, que hemos suplido con trabajo e imaginación.
"¿Qué se pretende conseguir en la Semana Santa?
"Sobre todo, que se viva con más intensidad. A ver si conseguimos que en lugar de ser un mero hecho tal vez un tanto frío se vea mucho más lo que realmente es una Semana Santa.
"Pues aquí precisamente en estos aspectos somos más bien moderados. El fervor popular no es el mismo de hace 20 años, por poner un ejemplo.
"El carácter mallorquín no ha sido nunca como el de la Península ni el del sur, concretamente. Sabemos que dichas manifestaciones no las podemos tener, ni lo pretendemos, porque consideramos que una cosa es la Semana Santa de Palma y las otras tienen sus peculiaridades. La nuestra es más sobria y pausada, y sobre esta característica se basa nuestro trabajo.
"La mayoría de gente relaciona al instante Semana Santa con procesiones. ¿En qué incide la junta además de éstas?
"En los actos previos de preparación de dicha semana como son una conferencia a cargo del obispo de Mallorca, y poco más, ya que la junta como tal poco puede hacer dentro de las cofradías en sí. Lo que nosotros no haremos, o al menos mientras sea presidente, será interferir en los asuntos internos de una cofradía.