Urgencias: una olla a presión

Son Dureta amaneció ayer nuevamente saturado con 70 pacientes en espera de una cama libre. Cuando uno acude al área de Urgencias de Son Dureta, espera encontrar un auténtico caos y enfermos entrando en tropel y «tirados» por cualquier sitio. Pero no. Entramos con toda tranquilidad por la puerta de Urgencias, la misma por la que acceden los enfermos, y nos dispusimos a realizar el recorrido que hace cualquier persona que requiere los servicios de urgencias. Es la gripe.

Frente a la puerta de urgencias se encuentran dos cuartos independientes en los que se encuentran los denominados «médicos de puerta» encargados de hacer un primer examen al enfermo. Claro está que si se trata de una urgencia vital como un accidentado o un infarto entran directamente a los boxes donde están los médicos de urgencias. Una vez vistos por el «médico de puerta» "que da prioridad a los verdaderos casos urgentes" estos son enviados o bien directamente a boxes donde le examinará un médico, que dirá qué hay que hacer y qué pruebas son necesarias, o a una sala de espera, para ser visto por el médico en los boxes. Allí se les practicarán una serie de pruebas y luego volverán a la sala de espera o permanecerán en los boxes, algo que dependerá de su gravedad y movilidad, en espera de los resultados. Unos, una vez ya atendidos en el box, se irán a casa y otros pasarán a observación donde se controlará su evolución. Si necesita una intervención quirúrgica va directamente a través de un ascensor a los quirófanos que se encuentran en la planta superior.