Los hoteleros aprueban los cambios introducidos por el Govern.

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Las reuniones mantenidas durante los últimos quince días entre representantes de las patronales hoteleras de las Islas y la Conselleria de Turisme se han saldado con la presentación de 46 enmiendas por parte del grupo parlamentario popular al proyecto de la Ley General de Turismo, lográndose, en boca del presidente de la Federación Hotelera de Mallorca, Pedro Cañellas, «suavizar los aspectos más polémicos del proyecto de ley, especialmente los relacionados con los planes de modernización, que sin renunciar a ellos porque los consideramos vitales, sí se ha logrado flexibilizar su ejecución».

Los grupos parlamentarios EU, PSM, PSOE y Mixto (UM y Verds), por su parte, presentaron ayer en el Parlament cada uno de ellos una enmienda a la totalidad del proyecto de la Ley General de Turisme, así como un total de 220 enmiendas (266 si sumamos las del PP) a su articulado. Las enmiendas a la totalidad serán debatidas en sesión plenaria el próximo día 16.

Un aspecto esencial introducido en las enmiendas presentadas por el PP, según el propio conseller y Cañellas, es que las empresas turísticas o asociaciones puedan presentar sus propios planes de modernización, que deberán ser reconocidos y homologados por la Administración, cuando hasta ahora primaba el hecho de que los hoteles debían cumplir con los planes nacionales o los fijados por el Govern.

Para Cañellas, «se trata de una apuesta por la autogestión, que reconoce la madurez del propio sector empresarial turístico balear».

Más claridad, menos rigidez y paliar vacíos legales
Las patronales hoteles de Mallorca, Menorca, Eivissa-Formentera, Restauración CAEB y PIMEM, Pimeco, Comisión Turismo de la Cámara de Comercio de Mallorca, Asociación de Salas de Fiestas, CAEB, patronal del tiempo compartido o multipropiedad, Agroturismo-Turismo Rural y sindicatos, entre ellos CCOO, han negociado con los responsables de la Conselleria de Turisme para mejorar el articulado de la Ley de Turismo, que al final ha supuesto la presentación de las 46 enmiendas por parte del PP al proyecto de ley.

Entre las modificaciones introducidas en las enmiendas del PP se incluye que la desaparición de la explotación agraria, ganadera o forestal supondrá la revocación de la autorización turística. Asimismo, introduce que para abrir nuevas plazas en Formentera deberán cerrarse otras tantas en esta misma isla y no en Eivissa.

Dentro del apartado de sanciones se rebajan los tiempos de prescripción, así como la catalogación de la gravedad de las mismas.