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La Policía de Reino Unido ha confirmado la detención de ocho personas tras las protestas y los altercados desencadenados durante el fin de semana en la ciudad de Bristol en contra de una nueva y controvertida ley policial, mientras que ha asegurado que más arrestos en relación con las manifestaciones son «inminentes».

En un comunicado publicado este lunes, la Policía ha asegurado que tras la investigación iniciada por el «violento desorden», son «inminentes» más arrestos.

En total, 21 agentes resultaron heridos, dos de ellos de gravedad, durante las protestas, mientras que diversos vehículos policiales, además de una comisaría, fueron incendiados y vandalizados.

De los arrestos, las fuerzas de seguridad detallan que seis son por cargos de desorden violento y otros dos por posesión de una arma ofensiva.

Más de 100 agentes y personal de la Policía de Avon y Somerset están trabajando en el caso, que está siendo dirigido por el equipo de investigación de delitos graves del cuerpo.

El cuerpo espera realizar más detenciones a medida que avance la investigación.

«Lo que sucedió en las calles de Bristol el domingo fue nada menos que vergonzoso», ha lamentado la jefa de detectives de la Policía, Carolyn Belafonte, que ha añadido que cuentan con mucho material audiovisual para obtener todas las evidencias posibles.

En los próximos días, ha continuado, difundirán el material recopilado para que el público ayude a las fuerzas de seguridad a identificar a los sospechosos.

«Esta será una investigación larga, pero estamos totalmente comprometidos a rastrear a todos los que participaron en el desenfrenado desorden. Para aquellos que participaron en esta ola de ofensas, pueden esperar que llamen a su puerta en los próximos días o semanas; puede que llegue antes de lo que cree», ha advertido Belafonte.

Tanto la ministra del Interior británica, Priti Patel, como el primer ministro, Boris Johnson, han condenado la violencia desatada en las protestas en Bristol.

«La gente, obviamente, tiene derecho a protestar en este país, pero debe hacerlo de forma pacífica y legal», ha recordado Johnson.

Lo que comenzó como una manifestación pacífica en el centro de la ciudad bajo el lema 'Kill de Bill', 'Matemos la Ley', acabó derivando en altercados después de que un grupo marchara hacia la comisaría de New Bridewell.

La ley, entre otros puntos, daría más competencias a las autoridades ante manifestaciones no violentas, incluidas las que se consideren demasiado ruidosas o molestas.